El aceite de coco ¿si? o el aceite de coco ¿no?
Pues SI. En la década de los 60 del siglo pasado la Sociedad Americana del Corazón hizo un estudio sobre las grasas y resultó que las grasas saturadas no eran buenas para la salud. Había que consumir grasas insaturadas de origen vegetal. Se incluyó al coco en ésta categoría porque el 90% de su composición son grasas saturadas aunque no formó parte del estudio. Pero el 75% de estas grasas son de cadena media y eso le hace diferente y después de estudios científicos se ha podido comprobar que es beneficioso para la salud cardiovascular. Pero ¡ojo! Apliquemos como en todo el sentido común. Ha de ser un aceite de coco virgen puro obtenido por presión de la carne blanca del coco, de cocos de cultivo ecológico. No sometido a procesos químicos de ninguna otra clase.
Entre sus beneficios citemos que eleva los niveles de HDL o colesterol bueno (protector cardiovascular) y disminuye los de colesterol o colesterol malo.
Tiene dos componentes que son el acido mirístico y el acido láurico que son protectores frente al síndrome metabólico ( hipertensión, sobrepeso, diabetes)
También tiene un efecto activador del metabolismo y para no entrar en explicaciones con nombres técnicos y términos médicos diré que hay estudios recientes que demuestran que por un efecto antiinflamatorio protege del Alzheimer .
Sólo hay un alimento en la naturaleza que tiene más acido láurico que el aceite de coco y es la leche materna y es un protector de la salud del bebé.
También es importante tener en cuenta en su uso para cocinar que su punto de ahumado ( la temperatura a la que hay que calentar un aceite hasta que comienza a echar humo y a partir de ahí alterar su naturaleza) es de 234º C.
Se puede usar para saltear verduras pero la verdad es que yo personalmente prefiero el aceite de oliva virgen extra por supuesto pero no está de más saber las propiedades de alimentos que tenemos a nuestra disposición.
Al tener propiedades antibacterianas y antifúngicas (anti “hongos”) se puede utilizar como pasta de dientes. Es mucho más sana que la que lleva fluor y compuestos químicos : se mezcla en un tarrito de cristal aceite de coco con bicarbonato y se le puede echar alguna gota de aceite esencial de menta o de eucalipto y ponerlo en el cepillo de dientes y listo.
Se puede poner una gotita en las manos y frotar el cabello para quien lo tiene rizado y se encrespa y en mi caso lo he usado como crema hidratante de pies y va muy bien.
Todo es cuestión de probar y ver cómo nos va.